martes, 1 de enero de 2008

Pensamientos


Imposible atravesar la vida...Sin que un trabajo salga mal hecho,
Sin que una amistad cause decepción,
Sin padecer algún quebranto de salud,
Sin que un amor nos abandone,
Sin que nadie de la familia fallezca,
Sin equivocarse en un negocio.
Uno crece cuando no hay vacío de esperanza, ni debilitamiento de voluntad, ni pérdida de fé.
Uno crece cuando acepta la realidad y tiene el aplomo para vivirla. Cuando acepta su destino, pero tiene la voluntad de trabajar para cambiarlo.
Uno crece asimilando lo que deja por detrás, construyéndo lo que tiene por delante y proyectando lo que puede ser el porvenir.
Crece cuando se supera, se valora y sabe dar frutos.
Crece cuando se abre camino dejando huellas, asimilando experiencias, ¡Y sembrando raices!.
Uno crece cuando se impone metas, sin importarle comentarios negativos ni perjuicios, cuando da ejemplos sin importarle burlas, ni desdenes, cuando cumple con su labor.
Uno crece cuando se es fuerte por carácter, sostenido por formación, sensible por temperamento... ¡Y humano por nacimiento!.
Uno crece cuando enfrenta el invierno aunque pierda las hojas.
Recoje flores aunque tengan espinas y marca camino aunque se levante el polvo.
Uno crece cuando se es capaz de afianzarse con residuos de ilusiones, capaz de perfumarse, con residuos de flores...¡Y de encenderse con residuos de amor...!.
Uno crece ayudando a sus semejantes, conociendose a sí mismo y dándole a la vida, más de lo que se recibe.
Uno crece cuando se planta para no retroceder...
Cuando se defiende como águila para no dejar de volar...
Cuando se clava como ancla y se ilumina como estrella.
Entonces...
Uno crece.

No hay comentarios:

Publicar un comentario