miércoles, 28 de mayo de 2008

Cromosoma Y


Hay un genetista inglés, Bryan Sykes, que ha determinado la fecha en la que el último hombre -hombre como género masculino- pisará la tierra.
Según este científico británico, que ya escribió un libro ("Las siete hijas de Eva"), en el que apuntaba que todos los europeos descendemos de siete mujeres, la fertilidad masculina está decreciendo a un ritmo constante, lo que dará como consecuencia que el planeta se quede sin representantes del cromosoma "Y".
Según su teoría, este cromosoma "Y" no es más que una mutación de uno de los dos "X" de los primeros pobladores, -mujeres y por lo tanto "XX"-, mutación que poco a poco tiende a desaparecer.
Algo por cierto que parecen avalar los análisis de la fertilidad masculina en estos últimos años, cada vez más bajos.
Sin embargo esto no supondría el final para la raza humana ya que existirán mecanismos para que la fertilización se produzca entre óvulo y óvulo, adaptación esta que ya utilizan algunas especies de animales como ciertas clases de peces o una especie de lagarto de Estados Unidos dónde los machos han desaparecido y las hembras producen huevos por clonación.
Resumiendo, que si este tiene razón, dentro de unos cuantos años todos seremos "mujer".
Y hablando de mujeres, no se dónde he leído algo que, aunque es políticamente incorrecto, no deja de llevar su puntito de razón:
"Las mujeres son como los continentes: a los 20 años son América, porque todos sueñan con conocerla, y los que lo consiguen resultan raramente decepcionados. A los 30 son Europa, sabias y llenas de madurez. A los 40 Asia, envueltas en promesas y misterio. Y a los 50 son África, que todo el mundo sabe dónde está, pero nadie quiere visitar".

sábado, 24 de mayo de 2008

Misoginia vs Machismo


Me cuenta una mujer, y sin embargo amiga, con la que comparto de vez en cuando churros en el desayuno, y, siempre que puedo, largas conversaciones, que la "misoginia" crónica, no es más que un problema de miedo.
Según su teoría, que va argumentando entre porra y porra, las mujeres producen ese temor por una razón muy clara: son superiores a los hombres en todos los sentidos.
Resulta que nos han estado vendiendo la historia cambiada, que la verdadera, la que todos los sabios del mundo saben, es muy distinta a la que enseñan "oficialmente", pero que por alguna extraña conspiración de intereses, ninguno se ha atrevido a contar.
Según sus "informes", el principio de todo es "ligeramente" distinto a la versión que todos sabemos:
Caminaba Eva por los jardines del paraíso con una expresión bastante deprimida. En ese momento oyó la voz de Dios:
-¿Qué es lo que no va bien en tu vida?
Eva dijo que no tenía con quien hablar. Dios, que quería verla contenta, le dijo que podría crear un compañero, al que llamaría hombre.
-Haré lo que esté en mis manos para que no sigas sola -continuó Dios-, pero no puedo prometerte mucho, ya que a ti te di lo mejor, y no debo crear dos cosas iguales. Esta nueva criatura será incompleta, ya que tendrá una costilla
menos que tú. Mentirá mucho, y cuando se sienta inseguro, tendrá una actitud arrogante.
-¿Ninguna virtud?
-Estoy pensando. Tal vez, para que no tengas que preocuparte de la alimentación, él será más hábil a la hora de correr tras los animales. Sin embargo, no te extrañe si, antes de podértelos comer, tienes que escuchar una serie de historias sobre su destreza y coraje.
-Por lo menos, terminará con la monotonía de este paraíso -dijo Eva.
-Cierto, pero será muy infantil, y encontrará placer en cosas muy tontas, como pelear y darle puntapiés a una pelota.
-Aun así, todavía es mejor que pasarse el día entero sola -insistió Eva.
Dios reflexionó por unos instantes y dijo:
-Está bien. Pero, como además de todo eso será muy vanidoso, tengo que poner una condición.
-¿Y cuál es esta condición?
-Tendrás que dejar que piense que él fue creado primero.

Quisiera hacer un breve comentario sobre el tema en cuestión, pero también matizar que este autor, ni es ni será nunca misógino. No confundir misoginia con machismo, pues la misoginia significa aversión al género femenino, pero machismo, se puede ser pero no tener aversión a las mujeres.
Esta aversión no es exclusiva de los hombres. La escritora española Anna Caballé –“Una breve historia de la misoginia. Antología y crítica”. Barcelona. Ed. Lumen, 2006; ha demostrado que muchas mujeres también han sido y son misóginas.
Grandes misóginos: Semónides de Amorgos, Giovanni Boccaccio, Alfonso Martínez de Toledo, Jaume Roig, Francesc Eiximenis, Pere de Torroellas, Hernán Mexía, Iñigo de Mendoza, Marqués de Santillana, Ambrosio de Montesino, Rodrigo de Reinosa, Francisco de Quevedo, Pío Baroja, Camilo José Cela, Francisco Umbral, y como mujeres: Pilar Primo de Rivera, Carmen Martín Gaite, Esther Vilar, y Elvira Lindo, entre otros/as.
- Alfonso Martínez de Toledo, más conocido como el Arcipreste de Talavera, incluye en su obra “ Corbacho o reprobación del amor mundano” ( 1438 ), el habla coloquial de Toledo del siglo XV, en medio de una prosa a veces latinizante. La obra abarca cuatro partes; la reprobación del loco amor; la condición y las costumbres de las “viciosas mujeres”, fiel a la tradición misógina medieval; las “complexiones de los hombres” y la reprobación de la exagerada creencia en los hados y en la astrología.
- Biblia ( Génesis, III, 16-17 ); consideró a las mujeres a las mujeres inferiores al varón a causa del pecado original de Eva y por castigo divino.
- Arthur Schopenhauer, filósofo del siglo XIX, gran misógino expresa: “Cuanto más noble es un ser, más tardado y lento es en llegar a la madurez. Un hombre difícilmente llega a la madurez de su potencia razonadora y sus facultades mentales antes de los 28 años, mientras que una mujer lo hace a los 18 años”.

Dedicada a una lectora del Blog: Paula Carpe Diem. (como respuesta a un comentario suyo).

FRASE: >>¿Por qué siempre se acaba el cartón de la leche o el del zumo cuando el vaso está a la mitad?.

miércoles, 21 de mayo de 2008

Envidia infantil


¿Por qué se empeñan siempre en presentar a los recién nacidos como unos pequeños seres indefensos? Proporciónese a cualquiera de ellos un hogar propio y nos daremos cuenta de que es el ser menos indefenso de todos lo que habiten en la casa. Lo único que necesitará para satisfacer sus caprichos es que se preocupen un poco de él. Si esto no ocurre, lanza un leve quejido, y si pasa del quejido a la rabieta, tendrá a toda la familia en vilo durante varios días.
No puede andar, ni hablar y tampoco alimentarse o bañarse por sus propios medios, pero hasta en eso tiene suerte. No puede andar, desde luego; pero sí, en cambio, permanecer echado en la cama todo el santo día, dando patadas al aire, algo que ya nos gustaría a muchos. Tampoco puede hablar, pero esto le evita contestar a tantas preguntas estúpidas que nos hacen a los demás cada día, discutir sobre política o fútbol o tener que aguantar por cortesía a cualquier pelmazo empeñado en contarle su vida. Y si tuviese que soportar esto último, siempre tendría la posibilidad de volverse de espaldas y dormirse, algo que ninguna persona, por muy educada que fuera, reprobaría.
No tiene que preocuparse de qué ropa se tiene que poner cada mañana o de qué es lo que va a comer. Nadie pondría ningún gesto raro si prefiriera estar desnudo, y si no le gusta la comida que le dan puede, con toda confianza, escupirla, lanzarla, vomitarla o simplemente rechazarla sin importarle la persona que esté presente.
Al terminar de comer le está permitido eructar a todo pulmón, ganándose los aplausos de los que, apenas un par de años después, le recriminarán esa misma acción. Igual que le criticarán las formas y los modales que use para comer pero hasta entonces todos se quedarán embobados si decide comer de la forma que sea.
Si luego se convierte en un hombre guapo, rico, bueno o triunfador, no faltará quien lo envidie; pero si por el contrario fuera feo, pobre, miserable o fracasado, le darían todos de lado. Ahora, quizá por última vez en su vida, los poetas le lanzan sus elogios, las señoras mayores lo acarician, todos lo adoran y todos lo miman. Es, sea como sea, el blanco de todos los piropos.
Lejos de representar ese ser indefenso que nos venden, un recién nacido es el único ente que puede utilizar el mundo como una palanca para satisfacer todos sus deseos. Y el mundo tan contento. Por algo ocho de cada diez pediatras confiesan que si volvieran a nacer les gustaría ser un recién nacido para siempre.

domingo, 18 de mayo de 2008

Tortura musical



Cuando suenen las trompetas, todo el pueblo subirá al ataque “ decía Josue a sus tropas cuando andaban liados en la conquista de Jericó. En la primera guerra del Golfo se anunciaba la llegada de los soldados estadounidense con canciones de Metalica. Y cuentan que la captura del general Noriega se hizo al ritmo de Judas Priest. Algunos presos liberados de Guantánamo aseguran que eran obligados a escuchar canciones de Eminen durante veinte días seguidos, y que la sintonía del programa norteamericano Barney formaba también parte de la torturadora banda sonora carcelaria.
La música ha sido siempre un instrumento de tortura útil, práctico y, sobre todo, barato. En ese sentido tampoco han inventado nada nuevo. Los ejércitos afirman que es una técnica psicológica más, pero los expertos lo definen como un método de tortura coercitiva. Someter a una persona durante horas a un mismo sonido, sea Mozart o Frank Sinatra, es un suplicio en toda regla. La mente sufre desorientación y confusión ante el ruido constante. También se interrumpe el sueño, por lo que el fluir del pensamiento se reduce hasta que su voluntad termina por romperse. Es entonces cuando el enemigo aprovecha para conseguir sus fines del prisionero.
Enhorabuena, lo han conseguido. Después de más de un mes aplicando la técnica lo han conseguido. Estoy en sus manos y dispuesto a darles todo lo que me pidan.. pero por lo que más quieran... ¡basta ya del chiki-chiki!

Frase: “El infierno está lleno de aficionados a la música”. (George Bernand Shaw, 1856-1950; dramaturgo y periodista irlandés)

miércoles, 14 de mayo de 2008

Calderilla...


("Este hombre es poseedor de una moneda de piedra
con la que podría comprar todo el poblado")

Siempre me quejo de lo molesto que resulta llevar calderilla en los bolsillos. Estorba, fastidia, te destroza el bolsillo del pantalón y encima, cuando la sacas (la calderilla digo), te crees que tienes una fortuna y no te llega ni para pipas.
Pero no voy a volver a quejarme. Visto lo visto por aquí somos unos privilegiados.
Los habitantes de Yap, una de las islas del archipiélago de las Carolinas Orientales perdidos en mitad del océano Pacifico, utilizaban hasta hace muy poco tiempo, unos discos de piedra a modo de dinero.
El intercambio se realiza con piedras de diversos tamaños, llegando incluso a los cuatro ( 4 ) metros.
Algunas piezas pesan hasta cinco ( 5 ) Toneladas. El valor varía según el tamaño, así, con una moneda de 10 centímetros se puede comprar, por ejemplo, un cerdo, y con una de 2 metros, se podría adquirir todo el poblado.
Los habitantes de la zona conocen el nombre, propietario e historia de todos los propietarios de las grandes piedras.
No me quiero ni imaginar el bolsillo de esta pobre gente teniendo en cuenta que la "piedra/moneda" de más valor pesaba exactamente 83,9 kilos.

domingo, 11 de mayo de 2008

Hacerse mayor...


Algunos pequeños detalles en los que empezamos a notar que el tiempo pasa...
Preferir los hoteles -cuatro estrellas mínimo- al camping. Dejar de ser tan "apasionado" con las opiniones para empezar a ser más políticamente correcto. Tener medio sex-shop en casa. Disfrazarse en los carnavales sin necesidad de ponerse la máscara, - ya empieza a ir incluida una natural-. Aburrirte cuando te quedas solo en casa. Empezar a ver las orgías como algo ridículo. Tener gatillazos. Engancharse al clamoxil. Intentar vivir una historia de amor con alguien más joven (¿por qué lo llaman "amor" cuando quieren decir sexo?). Intentar enamorase de alguien más mayor por su "interior" sin antes comprobar sus posibilidades "exteriores". Empezar a afeitarse todos los días. Ver a los antiguos compañeros de estudios casados, con hijos, calvos, con barriga y con bigote y pensar lo mal que trata el tiempo a los demás pero lo bien que se conserva uno mismo. Desear que a Brad Pitt le salga un grano. Comprobar que las gominolas sobadas tienen más sustancia y mucho más sabor (están mucho más ricas). Ir a Ikea y no comprar nada. Ir a Ikea y comprar una vajilla japonesa de treinta piezas. Ir a Ikea. Engordar. Leer los editoriales de los periódicos. Recoger los calcetines limpios enrollándolos de dos en dos. Los dolores de espalda. Los dolores de cuello. Los dolores de piernas. Los dolores del alma. Saber que ni Alaska ni José Manuel Parada formaron parte del Duo Dinámico. Saber quien es Alaska. Saber quien es el Duo Dinámico. Presumir de lo bien que uno cocina. Saberse el nombre de la Ministra de Cultura. La afición por los productos naturales (a poder ser con bífidus), la leche con calcio y los tés adelgazantes. Decirle a todo el que quiera oírte lo bien conservado que estás. Tener un tubo de hemoal en el botiquín. Creerte que Madonna canta. Empezar a abstenerse en cualquier votación, elección y/o referéndum (la abstención y la abstinencia suelen ir unidas). Ponerle esencia de lo que sea al agua de la bañera. Coleccionar cosas viejas e inútiles (la empatía suele funcionar). Empezar a creer que las cremas antiarrugas funcionan después de haber estado toda la vida pensando que los milagros no existen. Coleccionar cremas antiarrugas por si acaso existen los milagros y alguna funciona. Tirar la toalla con el inglés. No meterse en la oreja nada que no se compre en la farmacia. Fingir que has leído a todos los clásicos y que te estás aficionando a la música idem. Conocer el nombre del médico de la Seguridad Social que te corresponde. Empezar a desterrar aquellos tontos principios contra Gucci, Chanel, Dior, Valentino o Louis Vuitton. El sueño que te entra después de comer. El sueño que te entra a las diez de la noche. El sueño que te entra siempre y en todas las partes... menos cuando quieres que te entre sueño. Preferir el Corte Inglés al Rastro. Saber poner la lavadora. Pensar en hacer testamento. Subir siempre en ascensor. No darle importancia a que el coyote sea incapaz de alcanzar al correcaminos. Pensar en volver al gotelé. Cambiar de colonia. Apuntarte a un gimnasio. El aumento de las cartas del banco cada vez que abres el buzón (y que resulta ser directamente proporcional a los meses que vas cumpliendo). Empezar a usar la escobilla del retrete. Comprobar que la talla 38 de los pantalones la hacen cada vez más pequeña. Escribir un blog y ser capaz de mantenerlo más de dos semanas.

ja..ja..ja...ja.. suma y sigue....

martes, 6 de mayo de 2008

Curiosa ley no tan antigua



Manual de Derecho.

Descrita como figura jurídica el "uxoricidio honoris causa", o lo que es igual: "matar a la propia esposa por razón del honor".

Hasta el año 1963 -hasta ayer como quien dice- y en España -aquí mismo- el marido que matara a la esposa adúltera y a su amante sufría una "curiosa" pena: el destierro de su localidad.

Si el daño era "distinto" a la muerte, no se contemplaba castigo alguno.

Sin (más) comentarios.