miércoles, 17 de abril de 2013

ADOLFO FEDERICO DE SUECIA, "El Rey que comió hasta morir"

 
Adolfo Federico de Suecia (1710 – 1771) no fue uno de los mejores reyes de la historia. De hecho, se le considera uno de los más conflictivos de su país. Su carácter le hacía vulnerable a la presión de los partidos políticos, ante los que constantemente demostraba su debilidad y su escasa inteligencia para dirimir asuntos de Estado. Vástago de Cristián Augusto de Holstein-Gottorp y de Albertina Federica de Baden-Durlach, alcanzó el trono en 1751, pero fue elegido sucesor siete años antes debido a la falta de sucesión en el poder.

En aquel momento, el reino sueco era mucho más vasto que el que conocemos hoy: incluía Finlandia y Mecklenburg-Vorpommern (Estado de la actual Alemania). En sus intentos por evitar los movimientos separatistas de estas regiones, el monarca se granjeó la enemistad de todo el reino, pues en seguida se percataron de sus flaquezas. Se mantuvo dos décadas en el poder, los años en los que la monarquía sueca tuvo la influencia más baja de su historia. De hecho, se podían aprobar leyes sin el consentimiento del rey. El parlamento se fabricó un duplicado del sello de Adolfo Federico y, aunque este no otorgase su visto bueno a las leyes, éstas salían aprobadas.

Como vemos, Adolfo Federico de Suecia no pasó a la historia como un gran rey, no destacó por su astucia ni por su inteligencia. Sin embargo, su peculiar muerte sí le convierte en único: murió de empacho. El 12 de febrero de 1771 se homenajeó con un banquete descomunal: tomó langosta, caviar, chucrut, sopa de repollo, ciervo ahumado y un buen atracón de su postre favorito: Semla (uno de los dulces escandinavos más tradicionales). En total engulló 14 raciones, acompañados de grandes cantidades de champán. Aquella misma noche falleció, a causa de los graves problemas intestinales ante semejante ingesta. Por esta razón, se le conoce como “El rey que comió hasta morir”.
Frase: " La exclavitud no se abolió..., se cambió por 8 horas diarias..."


No hay comentarios:

Publicar un comentario